El hábito de succión es una de las primeras actividades coordinadas en el bebé y es que además de ser el mecanismo para alimentarse, la succión no nutritiva provoca sensación de calidez. Por eso el uso del chupete se transforma en una gran herramienta para calmarlos.
Pero… que los niños usen chupete o no lo usen. Que hace bien o que hace mal para el correcto desarrollo de sus dientes En los últimos, tiempos esta costumbre de los infantes ha recibido numerosas opiniones a favor y en contra. Por eso, en esta nota hablaremos de su uso y las recomendaciones médicas, de acuerdo a especialistas de la Fundación Hospitalaria – Hospital Privado de Niños.
Según los especialistas, el uso del chupete no llega a provocar malformaciones ni deformaciones óseas significativas que modifiquen la dentadura definitiva. Sin embargo, advierten que los efectos perjudiciales que ejerce este elemento se producen si el chupete sigue utilizándose luego de los 3 años de vida.
Si tu bebé usa chupete, tené en cuenta estas recomendaciones:
– Los bordes deben estar redondeados para evitar cortes o heridas y tienen que ser reemplazados por otro nuevo cuando tengan marcas de mordeduras.
– El chupete no debe tener elementos desmontables pequeños que el bebé se pueda tragar.
– Sus piezas deben estar unidas con la suficiente resistencia como para que no puedan romperse o separarse entre sí.
– El disco del chupete debe tener al menos 2 orificios de ventilación, para evitar que el niño se sofoque.
– La tetina debe ser de un material flexible y tener una longitud máxima de 30 mm.
– Si el chupete es de látex, hay que tener en cuenta que estos son más blandos pero se gastan y se deforman con más facilidad que los de silicona. Por eso, es recomendable cambiarlos por uno nuevo cada dos o tres meses.
– Los chupetes pueden ser de silicona, un material es más rígido, pero menos resistente a los mordiscos. Son fáciles de limpiar y resisten bien las altas temperaturas.