«Los abuelos son trasmisores de valores y costumbres familiares. Son los portadores de conocimientos, vivencias y experiencias”, señala la psicopedagoga Julieta Tojeiro. Ese es el rol que han tenido tradicionalmente y que los convierte en una pieza fundamental en el entramado familiar. El paso del tiempo y la modernidad no han cambiado esto, aunque sí podríamos decir que asistimos a una generación de abuelos más jóvenes y activos que en otras épocas, que combinan el abuelazgo con otros intereses y actividades. “Los abuelos hoy son, en su mayoría, personas profesionalmente activas, que eligen dejarse lugar en su agenda para estar, disfrutar y cuidar a sus nietos”, agrega la especialista.
DIFERENTE
Para la asesora, hay que tener algo muy en claro: “Ser abuelo no es ser padre». Esa etapa ya se vivió criando a los hijos. Se vivenció un nivel de responsabilidad con todas las dudas, temores y creencias sobre el “ser padre” en un tiempo que hoy quedó atrás. Con los años se pudo hacer y aprender de la propia experiencia, y estar ahora en la vereda del abuelazgo libera de todas esas incertidumbres. Entonces, en la tarea de cuidar a los nietos, se movilizan emociones profundas (como la alegría y la ternura) y llena de energía revitalizante. “Esta experiencia favorece y es saludable para nietos, padres y abuelos”, sostiene la profesional.
PAUTAS CLARAS
Por todo esto, es que dejar a nuestros hijos bajo el cuidado de nuestros padres, es sumamente positivo, aunque según Tojeiro, se deben dejar establecidas ciertas pautas necesarias para una buena convivencia: “Los abuelos deben tener claro que les delegan el cuidado por un lapso de tiempo determinado y no la crianza de los nietos. Y que su estilo y el de sus hijos no es algo a modificar, al contrario, será algo para encontrar puntos en común o diferenciarse”.
CLAVES
Por último, la asesora recomienda:
- Establecer de antemano una rutina para los chicos, a respetar por los abuelos.
- Encontrar puntos de acuerdo y no dejar nada en “supuestos”.
- Recordar que el tipo de vínculo que mostremos relacionándonos con nuestros propios padres será un potente modelo para nuestros hijos.
COINCIDENCIAS “Cuando en las entrevistas de orientación abordamos este tema, las madres tienen sus propias listas de ventajas y desventajas sobre delegar el cuidado a los abuelos”, comenta la Lic. Tojeiro. Éstas son:
VENTAJAS:
- Lo van a cuidar como a un hijo.
- Vas a trabajar con tranquilidad.
- Aprende una forma de jugar o de vincularse diferente que con mamá y papá.
DESVENTAJAS:
- Lo consienten.
- Te retan por cómo le hablás o lo tratás y se toman el derecho de decirte cómo criarlo.
- Cuando es un cuidado diario no hay mucho “límite” y se altera la rutina.
Fuente: Para Ti