Amigos y compinches: las mascotas y los niños

infancia mascotasTodos los especialistas coinciden: la relación temprana de las mascotas y los niños favorece el desarrollo integral de los chicos y contribuye a la satisfacción de necesidades emocionales. Además, ayuda a desarrollar su capacidad afectiva y de comunicación y es una experiencia enriquecedora para toda la familia.

Y no sólo eso. Otra de las ventajas de tener mascotas cuando en la casa hay niños es que los chicos generan un contacto con la naturaleza diferente, les genera otro tipo de hábitos, y fija límites y les implica aprender sobre lo que significa la responsabilidad.

Con los perros, por ejemplo, los chicos pueden potenciar sus actividades lúdicas, lo que  favorece su socialización y el desarrollo de habilidades motoras.

Por el lado de los padres, tener una mascota en casa puede ayudar a abordar diversas temáticas relativas a la vida: la reproducción, el nacimiento, las enfermedades, los accidentes, la muerte y el duelo.

Para lograr una convivencia armónica con la familia y la mascota es importante elegir a la más apta según el estilo de vida y los tiempos de cada familia y según las características físicas de cada hogar. Por su parte, los chicos también pueden ser parte del proceso de elección de la mascota y también pueden ser responsables, en parte, del cuidado del animal elegido, siempre con supervisión de los mayores.

Al respecto, la Fundación Affinity, de origen español, realizó hace muy poco un estudio analítico sobre la relación de los niños con los animales de compañía.
Mediante una encuesta, esta organización determinó, por ejemplo, que el 74% de las personas afirma que su mascota lo hace feliz o lo haría feliz si tuviera una; que un 31% piensa que su mascota es mucho más importante que cualquiera de sus amigos. El 70% entiende lo que quiere decir y el que vale la pena tener una mascota.

«En términos de vínculo emocional, un colectivo que se ha tenido especialmente en cuenta en este estudio son los niños. Según se ha comprobado, en un 60% de los casos el niño asocia al perro o gato con ‘compañero de actividades y juegos’. Como ya revelaba el pasado año la primera edición del estudio, 8 de cada 10 niños de entre 9 y 12 años prefieren jugar con su gato o su perro antes que los videojuegos», indica la investigación.

niñez gatos mascotasY agrega que «para uno de cada dos niños (46%), el animal es percibido como la principal fuente de apoyo emocional después de los padres. Los lazos afectivos con el animal de compañía son los que mejor les hacen superar la sensación de miedo o tristeza, pues el niño recurre de forma habitual a su mascota para abrazarla y encontrar alivio en estas situaciones. Este comportamiento se repite cuando al niño se le presenta un problema, ya que busca a su perro o gato como fuente de consuelo en la misma medida que a sus padres».

Finalmente, el estudio subraya los valores de responsabilidad que los animales de compañía transmiten a los niños: el primer concepto que asoció la mayoría de los chicos fue el de “cuidar”, seguido por “jugar” y “alimentar”.

Esta entrada fue publicada en Consejos para padres, Crianza del niño y etiquetada , . Guarda el enlace permanente.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.